La corbata es un complemento del atuendo del caballero y un detalle elegante. Pero no siempre fue así, su origen se remonta en el siglo XVI, cuando los croatas la utilizaban como accesorio en sus ropas de guerra. En la actualidad es indispensable para completar el look del novio, en el siguiente artículo te mostraremos varias alternativas para que elijas la más apropiado para tu traje.
LA CLÁSICA
La clásica es la más utilizada por los caballeros y sin dudas, es la que se adapta mejor en la mayoría de los trajes del novio. Se puede llevar tanto con los trajes convencionales como con smoking. Además, su elegancia y acabado simple pero detallista la convierten en un agregado elegante. Es usual cuando la boda es en días cálidos y apropiada para un evento de gala o con poca formalidad.
LA ASCOT
La corbata ascot también llamada plastrón o corbatón es una de las alternativas para complementar el traje. Su diseño es un poco más ancho que la clásica y su nudo es diferente, simulando que parte de un pañuelo. Es muy elegante y llamativa gracias a su gran tamaño e ideal para llevar con un chaleco o jaquet.
CORBATA DE MOÑO
La corbata de moño es conocida como pajarita o corbatín. A diferencia de sus similares, esta alternativa no recorre el largo de la camisa, al contrario se mantiene a la altura del cuello simulando un lazo. Se puede utilizar con trajes frac o smoking. Sin embargo en los últimos tiempos los novios lo han adoptado para usarlo con atuendos más relajados.
TEXTURA Y DISEÑO
En los años 80 y 90, las corbatas de texturas y diseños eran las preferidas por los caballeros. Aunque ha pasado un tiempo considerado, este estilo sigue estando vigente para los novios más conservadores y formales. Una buena corbata con relieve es única, además suelen resaltar un poco más que el resto.
SLIM
La corbata slim se ha posicionado como una de las más elegidas por los novios. Sin embargo, es un estilo que no es adecuado para cualquiera. Su diseño va dirigido a personas esbeltas, altas y con una compostura delgada. Además, debe llevarse con un traje ajustado al cuerpo. Es menos ancha que la corbata clásica y un poco más larga, su aspecto casi desapercibo la hace elegante en trajes de gala.