El vehículo nupcial es el encargado de llevar a la novia al altar y de trasladar a los recién casados, por tal motivo debe destacarse con una decoración especial que lo identifique para esta solemne ocasión. Anímate a conocer algunas propuestas inolvidables para que todos los invitados se emocionen y griten ¡llegaron los novios!
Los carros nupciales pueden ser modernos, antiguos, clásicos, pequeños y muy peculiares; sin embrago, éstos deben estar muy bien decorados para que sean apreciados durante el día más importante de tu vida. No necesitarás de adornos muy recargados, solo bastará con un pequeño y clásico toque floral que le proporcione una belleza estética.
Las flores acompañadas de vistosos letreros, son una alternativa muy fresca y vanguardista en donde podrás mostrar detalles sublimes como lo es el nombre de los recién casados, la fecha de su unión y hasta célebres frases como por ejemplo “nos casamos”. Estos carteles personalizados tienen que ser colocados en la parte trasera del carro nupcial para armonizar de forma emotiva la llegada de los novios a su recepción.
En la actualidad, suelen decorar la parte de atrás del auto con algunas latas que cuelgan de una forma muy atractiva y divertida que llaman la atención de la gente por su marca sonora durante el recorrido de los novios; pero más que un elemento decorativo, es una antigua tradición norteamericana que asegura que el alegre sonido del repicar de las latas contra el suelo espanta a los malos espíritus que quieran asechar a los recién casados, y al mismo tiempo protegerá su camino marital.
Dependiendo del estilo de tu boda, el novio es el encargado de elegir y coordinar la logística del carro, que en realidad es el medio que transportará a la novia desde su casa hacia la iglesia y luego llevará a los recién casados desde la iglesia hasta recepción. No importa si el vehículo es moderno o con un diseño muy original, siempre habrá un detalle que se ajuste para que éste vaya a tono.
Recuerda que será infalible decorar con pequeños ramilletes de flores, unos listones de tela o quizás unos banderines con un hermoso letrero que manifieste que allí se desplazan la pareja de recién casados.
