Compartir un delicioso pastel después de una ceremonia bautismal se ha convertido en un hermoso ritual para agasajar a un niño por haber cumplido su primer sacramento cristiano. Este post te muestra algunas opciones apropiadas para esta ocasión tan especial.
CON ESTILO MUY SOBRIO
Una de las alternativas más clásicas son los pasteles sencillos, no tan estructurales y con colores neutros, que brinden una armonía muy sobria y acorde a la celebración bautismal. La cima del pastel no debe llevar adornos recargados, sólo algunos símbolos religiosos para darle un poco de protagonismo.
COLORIDOS Y ESTRUCTURALES
Si deseas un pastel fuera de lo tradicional, ofrece uno de varios niveles que combine diversos colores para marcar la diferencia. También puedes añadirle variedad de adornos comestibles para personalizarlo y hacer que luzca completamente encantador.
BLANCO CLÁSICO
Para las personas que apuestan por un pastel que mantenga la tradición y la pureza que refleja la ceremonia bautismal; no hay nada mejor que sorprender a los invitados con un fino bizcocho en un tono blanco clásico, decorado de una forma muy elegante y con finas técnicas para que derroche glamour y elegancia.
PASTELES MODERNOS…
Los pasteles más cautivadores son aquellos que deslumbran por sus colores y por las modernas técnicas de decoración que posee. Si deseas tener uno de ellos en el festejo de tu hijo, no descartes la posibilidad de escoger un pastel muy elegante en los tonos de tu preferencia, sin dejar pasar algunos elementos místicos que le den el toque apropiado para este tipo de celebración.
CON SÍMBOLOS DEL SACRAMENTO BAUTISMAL
Incluir algunos símbolos relacionados a la ceremonia bautismal, es una opción muy peculiar para decorar el pastel; lo mejor de todo es que existe gran variedad de elementos religiosos que puedes agregarle como por ejemplo: la biblia, una pila bautismal, la clásica vestimenta blanca y hasta la vela, que representa la luz de Cristo que guiará el camino del bautizado hasta el fin de su vida.
